lunes, 15 de septiembre de 2008

UN PEZ TEMBLANDO EN LA ALFOMBRA

Cito un texto de David Mamet en el que se utiliza un concepto de Eisenstein:

"Hay que dejar que la historia se cuente por medio de cortes. Es decir, de una yuxtaposición de imágenes en principio inintencionadas. Eisenstein afirma que las mejores imágenes son aquellas que no están cargadas de intencionalidad alguna. Una toma de una taza. Una toma de una cuchara. Una toma de un tenedor. Una toma de una puerta. Que sea el corte el que cuente la historia."

Y ahora un fragmento de una historieta de Blutch:

En el ejemplo, cada viñeta es completamente neutra. Vistas de forma aislada no tienen el menor significado: tres personas caminando por la calle. Siguiendo con la terminología que comparten Mamet y Eisenstein, son viñetas inintencionadas. Es el corte, la yuxtaposición, el montaje... las que llenan esas viñetas de significado e intensidad, las que nos hacen pensar en una pareja rompiendo por culpa de otra mujer. Siguiendo con las citas, creo que Quentin Tarantino habla de cine en boca de David Carradine:


BILL: Y cuando levantaste el pie... ¿qué estaba haciendo Emilio?

B.B.: Nada.

BILL: Había dejado de temblar, ¿no?

(A Beatrix)

Luego me dijo que en cuanto levantó el pie del suelo y vio que Emilio estaba quieto supo lo que había hecho. ¿No es una imagen visual perfecta de la vida y la muerte? Un pez temblando en la alfombra y un pez que no tiembla en la alfombra. Es tan fuerte que una niña que no sabía lo que era la muerte lo comprendió.

Una imagen. Y luego otra. El significado surge por sí solo en nuestra mente.

  • Mamet, David. Cómo dirigir cine. Ediciones El Milagro. México, D.F. 1997.
  • Blutch. C'était le bonheur. Futurópolis. 2005
  • Tarantino, Quentin. Kill Bill vol.2. A Band Apart. 2004.

2 comentarios:

El Profesor dijo...

Gran primer post. Es la base, el "kit" (te necesito) de la narración visual.

Pedante Alighieri dijo...

Gracias, profesor. Más fácil decirlo que hacerlo. Por ahí leí, ¿en el libro de Mamet, quizás?, que las herramientas sencillas son fáciles de usar, pero tremendamente difíciles de dominar.